Historia de nuestro logo y su actualización

Todos somos naturaleza
Creemos en el hábito de la reflexión y las acciones que se gatillan al abrirnos a procesos de retroalimentación, aprendizaje y autocrítica. Aquí les contamos la historia de nuestro logo, las oportunidades de refrescarlo para representar nuestro sentir y el resultado que da la bienvenida a nuestro nuevo logo.

¿Cómo nace el logo Karün?

Hace 8 años, en el 2012, nace Karün como empresa, desafiando las leyes que hasta el momento delimitan a las empresas.

Este tipo de empresa diferente nace para redefinir la forma de operar y demostrar - con ejemplos concretos - que una empresa puede convivir en armonía con la naturaleza, como las comunidades indígenas llevan miles de año haciendo.

Esta forma de pensar se quiso traspasar al nombre e ícono que representaría a esta empresa, por lo que para sintetizar su sentir,  honrar la sabiduría de  las comunidades indígenas y hacer eco de su forma de habitar, esta empresa decide nombrarse Karün, eligiendo una palabra mapuche y la reinterpretación de un símbolo mapuche en su logo, para que denotara la apreciación que este grupo humano tiene por el conocimiento ancestral:

¿Cómo se construyó el logo y nombre?
De la mano de una fundación llamada Fundación Memoria Azul que trabajó con diferentes líderes mapuche durante muchos años.
Leer historia aquí.

Reflexiones y cuestionamientos presentes

Hoy, 8 años después de la gestación de la marca, miramos nuestra historia con orgullo, con humildad y con felicidad de todos los avances que hemos ido construyendo para paso a paso armar una empresa diferente; desde la apreciación cultural; con la naturaleza y el trabajo colaborativo en su corazón; con avances concretos en usar nuestra plataforma como un medio para regenerar economías locales e inspirar a más personas a reflexionar. 

Algunos hitos que creemos relevantes visibilizar en este contexto:

- Trabajar mano a mano con comunidades rurales para juntos hacernos más fuertes a posibles amenazas externas y contribuir en la protección de Patagonia a través de su comunidad. Hoy tenemos un compromiso con Cochamó de 1 millón de dólares aproximadamente y 4 años  de trabajo (desde 2019) y estamos sumando la localidad de Capitán Prat (Aysén) al compromiso para empezar a trabajar juntos a partir del 2021.

- Mudamos la base de nuestra empresa a región, para contribuir a la descentralización de Chile y estar más cerca de las comunidades rurales que nos inspiran y con que trabajamos.

- Trabajar la cultura de la empresa para asegurar que en el crecimiento mantengamos el contacto con nuestra raíz y entendamos desde la humildad cuánto tenemos que aprender para seguir mejorando nuestros procesos y aplicar los conocimientos rurales y ancestrales desde el colectivo de nuestra organización y también desde le individualidad de todos los que conformamos la organización. Para esto tenemos programas de capacitación en la naturaleza, con la comunidad rural que vuelve realidad nuestro compromiso; tenemos clases de mapudungún para toda la empresa 2 veces al mes. (Patricio, nuestro profesor, escribió sobre nosotros en un relato que publicó en LinkedIn aquí.); armamos una huerta para vincularnos con la naturaleza desde la base - nuestra alimentación - y otros proyectos afines.

 

Hoy, bajo estas reflexiones, vemos la oportunidad de refrescar nuestro logo para armar un símbolo propio que nos represente como grupo. Como dice nuestro manifiesto:

Somos los nuevos habitantes de esta tierra. Habitantes que cuidan el medio ambiente y al ser humano. Habitantes que creen que para ser empresa, para marcar tendencia e imponer la moda, no se requiere perder la humanidad ni las ganas de soñar. Habitantes que no conocen de fronteras pero que a la vez, están orgullosos de la tierra que los vio nacer

En Karün creemos en nuestra juventud y en nuestros ancestros, en nuestro entorno, en la tierra, en los bosques, en la sustentabilidad, en el comercio justo, en el respeto, en la calidad y en la belleza de las cosas.
En la lengua de la tierra... Somos naturaleza: Somos Karün.

Cambios a generar y racional

1. Reinterpretación del cultrún

Nuestra reinterpretación del cultrún mapuche creemos que quedó muy cercano al cultrún sagrado del pueblo. Esto es un problema debido al riesgo potencial de que nuestro uso pueda generar una desvinculación del símbolo real de su significado para el pueblo, en un contexto y espacio muy diferente al de origen.

DECISIÓN: Cambiaremos nuestro isotipo y con él nuestro logo que integra la palabra y el isotipo.

 

2. Karün como palabra

Es hacer uso de un idioma. Podríamos usar la lengua de los españoles o la de los mapuche. Nos sentimos honrados y alineados usando la lengua del pueblo que habitaba estas tierras antes de la llegada de los españoles. No le vemos un problema mayor a la palabra desde el idioma, tal como muchas palabras y nombres de lugares que usamos como chilenos son en mapudungun, como Llanquihue, Cochamó, merkén, etc…

“Debemos usar más el idioma. Karün puede convertirse en un actor clave para la revitalización de la lengua mapuche, que no está ni muerta ni olvidada” - Patricio Bello, profesor mapudungun.

 

Nuevo racional para construcción de símbolo  

Queremos que se refleje el impulso que tenemos como grupo de personas de convertirnos en un puente entre la forma degenerativa de hacer empresa y la regenerativa; entre lo ancestral y lo moderno; entre las generaciones más maduras y las más nuevas; entre el ser humano y toda la biodiversidad con que comparte esta tierra.

Nuestro nuevo racional dice así:
“La naturaleza integra todo, y está formada por fuerzas polarizadas; como lo ancestral y lo moderno, la concepción degenerativa de hacer empresa y la regenerativa, lo emocional y lo racional, etc.
Estas fuerzas las solemos concebir divididas. Nosotros queremos convertirnos en el puente que encuentra los espacios de unión de estas fuerzas. Suavizar las líneas que nos dividen bajo la reflexión de que todos somos naturaleza: Karün”

Aplicando diseño al relato

 

Resultado

 

Creemos que nuestra generación tiene la responsabilidad de reconocer las diferencias que nos han dividido en el pasado y desde ese reconocimiento, comenzar a construir una nueva realidad. Una realidad que busque el encuentro, que se construya desde la empatía, la colaboración y el sentido de comunidad (comun-unidad). Como generación debemos construir nuevos símbolos que representen nuestra unidad con nosotros mismos y de nosotros con la naturaleza.

 Los invitamos a ver el mundo desde otro puntos de vista.